Para las novias que optan por ir sin velo, el tocado es una opción que definirá su estilo propio. La amplia oferta de adornos para el pelo es para todos los gustos.
Birdcage
Da un estilo retro a la novia. Combinado con los labios rojos es una apuesta segura para un look vintage.
Como una oda a los años 20, el Velo o redecilla Birdcage resurge con fuerza en las bodas. Los hay de todos los estilos. Tapando un ojo, ambos o con la redecilla a modo de detalle sólo para el pelo.
Coronas de flores para novia
Una de las apuestas más fuertes de los últimos años para los adornos son las son las coronas y diademas de flores para el pelo.
Naturales o no, dan un estilo hippie y bohemio que debe ir en consonancia con un vestido de corte romántico y sencillo.
Son perfectos para una boda campestre al aire libre. Hoy en día, donde lo artesano y diferente es tendencia, existe una variada oferta de fabricantes de coronas de flores personalizadas. Uno de mis preferidos es Sheewboheme, que desde Barcelona cuidan cada detalle del tocado y hacen verdaderas obras de arte para el pelo.
Cintas en la frente para novias
Las cintas en la frente se han vuelto a poner de moda. Esta vez, para las novias. De ganchillo, tull o con detalles en pedrería y pocelana. Son una de las apuestas fuertes para esta temporada.
Flores de porcelana para el pelo
En un recogido bajo o como un adorno lateral, las flores de porcelana son un elemento muy identificativo de una novia. Aportan un toque de color y frescura a los peinados de boda.
Tocados con plumas
Es algo que siempre hemos visto en los tocados de fiesta, y ¿Por qué no apostar para ello si eres una novia? Las plumas aportan distinción y pueden ser el complemento ideal si buscas algo llamativo. Anita Ribbón en Bilbao, hizo para una de nuestras novias esta maravillosa diadema con plumas que causó sensación.
Sombreros para novia
El sombrero es una opción arriesgada pero de total actualidad. Tras la propuesta de YolanCris para su colección de 2013, ya son muchas las novias que se apuntan a esta tendencia.
La variedad es infinita, de paja, con pedrería, canotier, pamelas… ¿Con cuál te quedas?